Una alfombra de yoga ha servido a Daniela Darquea para simular el césped de las canchas de golf, pues ya se acerca a los dos meses de entrenamiento en casa debido a la pandemia del COVID-19. Así, varios deportistas han tenido que adaptar sus disciplinas al confinamiento.
Darquea comenta que a finales de febrero pasado debió suspender su planificación que estaba enfocada en los eventos puntuables para Juegos Olímpicos. “La suspensión por el COVID-19 empezó en febrero para el golf. Nosotros teníamos planificado ir para Asia y ya para ese entonces estaba bastante tomado el continente asiático por el virus… Se iba a jugar en China, Singapur y Tailandia, y ya para principios de marzo se suspendió, así que regresé a Ecuador, estuve aquí en Quito cuando empezó el cierre de fronteras y la cuarentena”, contó Darquea.
Desde entonces se ha mantenido en contacto con su entrenador, quien le envía una planificación para que pueda mantener su forma deportiva en casa, donde no se cuenta con un campo abierto como lo requiere el golf.
“Estoy tratando de mantenerme activa en casa, haciendo entrenamiento físico y ejercicios técnicos. He estado muy enfocada en el juego corto, haciendo videos que le he estado mandando a mi entrenador. Estoy practicando con una alfombra de yoga, simulando como si fuera pasto…”.
LUCHA
Para la lucha también ha sido complicado entrenar en casa, pues es un deporte cuya técnica requiere contacto con el oponente. “Tengo todos los días contacto con mi entrenador (Manuel Rubio) y estoy cumpliendo con la planificación que me asigna… No tengo lona solo lo físico y lo practico que me manda, el resto es mirar videos de lucha de los contrincantes”, dijo Andrés desde Portoviejo.
Con los apuntes tomados en un cuaderno, Montaño se guía para completar sus jornadas diarias. A falta de un espacio abierto como es característico en los coliseos de lucha, el especialista en el estilo grecorromano adapta los ejercicios en la sala de su hogar, el portal de su casa, las escaleras y barandales, e incluso cuenta con la ayuda de su esposa para probar su fuerza… Pone algo de música para amenizar el entrenamiento.
“He visto que se han suspendido muchos campeonatos, esto preocupa a muchos atletas y países, pero hay que esperar la solución y ver cómo se comporta el coronavirus… Ahora nos preocupemos más por la salud y cuidar de la familia”, comentó Montaño, quien participó a principios de marzo en el Preolímpico en Canadá, uno de los últimos eventos que se desarrollaron, ya que luego la Unión Mundial de Lucha canceló los clasificatorios continentales de Asia y Europa.
MARCHA
Los marchistas son otro grupo de deportistas que se han visto obligados a llevar los entrenamientos, que comúnmente se hacen en las pistas de atletismo o en las calles, a la casa. La campeona panamericana Johana Ordóñez ha sabido adaptar varios implementos para cumplir con sus jornadas diarias.
“En casa tengo una caminadora y un soporte de bicicleta, no específicamente un rodillo, pero me ayuda. Además, tengo una barra y hago ejercicios de fortalecimiento”, dijo Johana desde Cuenca.
Como la caminadora está adaptada para correr, Johana ha optado por ponerla muy lento para poder aplicar la técnica de la marcha. “Depende del trabajo que haga, a veces llego a 12 o 15 km, hace dos semanas hice 21 km, pero entre 8 y 12 estoy normalmente”.
A la bici además del soporte colocó una esponja en la rueda para que el esfuerzo sea mayor y así poder fortalecer las piernas. En su casa su esposo soldó hace algún tiempo una barra en su balcón, ese implemento es el que ahora le ayuda para poder realizar ejercicios.
Ante el cierre de los gimnasios y espacios deportivos por la pandemia, es así como los deportistas buscan la forma de seguir entrenando, con mucha creatividad, pero quedándose en casa.