Las revanchas llegan y esta se le dio a Julio Castillo. El púgil que no pudo ganar los Juegos Panamericanos de Lima 2019 por un fallo polémico, logró este viernes 20 de septiembre instalarse en la final de los 91 kg del Campeonato Mundial de Boxeo en Ekaterimburgo-Rusia y entrar en la historia del deporte ecuatoriano.
En 2017 fue Carlos Mina quien se colgó la medalla de bronce mundial en el campeonato de Hamburgo, Alemania. Así se consolidó como el primer ecuatoriano en colgarse una presea en un Mundial de boxeo. Sin embargo, lo alcanzado este viernes por Castillo supera el logro de su compatriota ya que el sábado peleará por la medalla de oro con la posibilidad de coronarse campeón, lo que sería una hazaña histórica.
El kazajo Vassiliy Levit, medallista de plata de los Juegos Olímpicos Río 2016, fue el rival de Castillo en semifinales. La pelea estuvo bien disputada, pero Julio supo eludir con gran destreza técnica las arremetidas de Levit y con golpes certeros se impuso por fallo dividido 3-2 para meterse en la final.
Por el título este sábado, Castillo, séptimo cabeza de serie, se enfrentará contra el ruso Muslim Gadzhimagomedov (5), quien en la otra semifinal eliminó al búlgaro Radoslav Panteleev por fallo unánime (5-0).
El tricolor está en su mejor momento. Ha venido cosechando triunfos a nivel internacional. En Lima 2019 se quedó con la medalla de plata luego de un polémico fallo de los jueces a favor del cubano Erislandy Savón, campeón defensor del presente Mundial, que esta vez quedó eliminado en cuartos de final.
