En un año en el que el ciclismo masculino ha sido gran protagonista a nivel internacional, Miryam Núñez hizo fijar las miradas en las damas, coronándose campeona de la Vuelta a Colombia Femenina 2020.
La riobambeña de 26 años, quien ha representado al país en Juegos Bolivarianos, Suramericanos y Panamericanos en las pruebas de ciclismo de montaña y de ruta, nos cuenta en la siguiente entrevista sus inicios en este deporte y su salto a nivel profesional.
¿Cuándo comenzó a practicar ciclismo Miryam Núñez?
“Yo empecé esta aventura del ciclismo a los 13 años por mi hermano mayor, él practicaba también ciclismo, me acompaño dos años pero luego él se tuvo que retirar porque tuvo un accidente. Nunca pensé en hacerlo como algo profesional o que me ayudara a vivir, en ese momento solo como deporte. Recuerdo que mi papá siempre me decía que aparte del estudio está el deporte, aunque al inicio a él no le gustaba mucho que haga ciclismo, porque no había muchas niñas que practicaban”.
¿Cuándo comenzaron a llegar los logros que la motivan a continuar?
“En el 2012 en los Juegos (Nacionales) Juveniles que fueron en Ibarra alcancé cinco medallas de oro y una de plata, y en ese mismo año me convocaron para ser seleccionada nacional. Desde ahí empezó a cambiar un poquito mi vida porque yo todavía estaba en el colegio y no sabía si me iba a seguir en la bicicleta. Lastimosamente no tuvimos los recursos suficientes para entrar en la universidad y decidí probar un año con la bici y ver cómo me va. Iba a las carreras y me ayudaba mucho en lo económico para lo que yo necesitaba comprar comida y muchas cosas. Gracias a Dios año tras año me he ido sintiendo mejor, he tenido buenos resultados".
¿Cómo fue el salto al ciclismo profesional?
“En 2019 tuve la fortuna que me convocaran a correr la Vuelta a Guatemala con el equipo de la selección sudamericana de Panam Sports. La Copaci (Confederación Panamericana de Ciclismo) conjuntamente con la Federación Ecuatoriana (FEC) hicieron todos los trámites para poder participar. Me fue super bien, gracias a Dios quedé campeona de los premios de montaña y quinta de la general, venia de un buen proceso antes había corrido la Vuelta a Costa Rica. A raíz de estos resultados el equipo Swapit Agolico, que era el único profesional en Latinoamérica me hizo la contratación por seis meses, aprendí muchísimo, estuve en Estados Unidos, es muy diferente el ritmo de carrera en Europa o Estados Unidos es muy duro".
En este año la pandemia a afectado mucho al deporte, una vez que conoció que sí se iba a dar la Vuelta a Colombia ¿Cómo le abrió las puertas el equipo colombiano Liro Sport – Alcaldía de la Vega?
En el 2018 yo corrí la Vuelta a Colombia con ellos, en ese entonces se llamaban Cycling Girls Team, en ese momento solo fui de gregaria, tenía que trabajar para mi líder. Me comuniqué con el entrenador a ver si me podía dar la oportunidad de correr este año, él me dijo ‘sí Miryam ven, estoy recién armando el equipo, yo te aparto un cupo, hacemos las pruebas acá para ver cómo estas entrenando. Solicité el apoyo de la FEC para viajar”.
¿Cuándo empezó a tejerse ese sueño de lograr el título de la Vuelta a Colombia?
“Estando allá, el técnico me dijo que iba a ser la líder del equipo, iba a ser la capitana y la idea era pelear la Vuelta. Yo igual acá de casa salí con esa mentalidad de ir a pelear la Vuelta. Había tenido días atrás un test con mi deportólogo Juan Santamaria y mi entrenador Washington Vargas, al escuchar a ellos que estaba en buena forma, cada día me fui alimentando de confianza, de seguridad para poder ir a pelear la Vuelta…”.
¿Cómo fue la experiencia?
“Muy bonita la experiencia, para mí fue de mucha felicidad saber que iba de líder, que ya no iba a trabajar para nadie, casi la mayoría me había tocado trabajar y no tenía la oportunidad de ir de líder. El equipo muy atento conmigo, a pesar que todos eran de Colombia y yo la única ecuatoriana, todos muy amables”.
¿Qué impresiones vinieron a la cabeza de Miryam cuando se vio con el título en las manos?
“Siempre tuve presente a mis padres, durante la carrera, en el podio, por todo lo que ellos han pasado conmigo, por el apoyo que he tenido de parte de ellos, son mi motor y a eso se suma mi entrenador que siempre ha estado siguiendo mis pasos. Todo era felicidad, la idea era no llorar… En ese momento no me salían ni palabras de lo emocionada que estaba, no lograba entender lo que estaba haciendo. Recuerdo que le dije a mi papá siento que todavía no me despierto del sueño que les conté antes de salir de Ecuador, son muchas emociones que en ese momento uno no puede explicar”.
¿Ahora esperas que tu logro permita mostrar más el ciclismo de ruta femenino del país?
“Quisiera hacer un llamado a todas las empresas privadas, a que se arriesguen a apoyar al ciclismo femenino, porque sí hay muchas mujeres que lo practican desde infantil hasta la elite. Muchas veces nos comparan con los resultados de los hombres, ellos también sacrifican, pero tienen un poquito más de apoyo, espero que de la misma manera se animen a incentivar el ciclismo femenino y en un futuro poder tener un equipo de mujeres de Ecuador y no tener la necesidad de buscar equipos de mujeres extranjeros, que en un futuro no solo sea Miryam Núñez la que esté corriendo en Costa Rica, Guatemala o Colombia, sino sean más niñas que estén representando al país”.